domingo, 2 de marzo de 2014

Frágiles




Afirmo bien la esperanza, 
cuando pienso en la otra estrella;
nunca es tarde, me dice ella,
la paloma volará.
Victor Jara





Del desastre siempre se escribe en pretérito imperfecto, no tiene el desastre narradores del presente. Si los tiene, se les llama periodistas de guerra, exaltados o agoreros. Estoy convencida de que en tiempos de desastre decidimos pocas cosas, desde luego, no decidimos el curso del desastre. 

He buscado en el diccionario el significado de la palabra dignidad que dice :cualidad del digno, el que se respeta a sí mismo, el que merece  respeto. 

 Hace unas semana acudí al estreno de la película MAQUIS dirigida por Lican Esteve de la productora valenciana Cremant Muses, que cuenta el periplo de un equipo forense en la exhumación de las fosas comunes de los maquis en la zona de Cuenca, Comunidad Valenciana y Teruel. 120 cuerpos, muchas más historias, el esfuerzo de famílias y pequeños colectivos locales por conocer el destino de sus padres, abuelos, hermanos, desaparecidos sin rastro, sin documentos de detención, sin juicio sumario. La voluntad de esas personas es la de conocer el pasado, la de encontrar un rastro físico que complete un espacio insostenible en la memoria, algo tan humano que parece impensable que pueda ser negado desde cualquier institución, como de hecho ocurre desde que la nueva administración derogó la ley de memoria histórica. 
Al acto acudió un conocido escritor valenciano de izquierdas que ha publicado varios libros sobre los Maquis. El reconocido intelectual, se adueñó del turno de palabra en el evento y dijo que las lágrimas no eran suficientes, que los familiares no podían intentar justificar que sus parientes no tenían nada que ver con el Maquis, que la reivindicación de las exhumación de las fosas no podía quedarse en una historia humana, que era una reivindicación política e ideológica, y que no sólo había que exigir dignidad sino justicia. Y me pregunté quién era ese señor para decirle a los octogenarios familiares de los desaparecidos lo que tenían que exigir y lo que no, lo que tenían que reivindicar y lo que no. ¿Y por qué una palabra tan bella como la dignidad era relegada a una segunda fila en pro de no sé qué principios ideológicos? Yo no quiero luchar junto a una izquierda que se sienta tan legitimada para decidir lo que sí y lo que no, lo que es reivindicable y exigible, lo que se debe pensar y sentir, como la derecha más autoritaria. 



Uno es responsable de pocas cosas. Puede que con el tiempo, uno sea bastante responsable de la gente de la que se rodea. Decía Raoul Vanengheim, miembro de la Internacional Situacionista, que no hay nada más peligroso que contentarse sólo con sobrevivir. En mi caso, los abajo presentes, no son supervivientes, sino exploradores, investigadores y narradores del desastre. 

El viernes por la noche, mis amigas del instituto, familias y compañeros de partido, acudimos a ver el estreno de Alberto San Juan en el teatre Micalet de Valencia "Autorretrato de un joven capitalista español". Lola era la tercera vez que veía la obra, yo la segunda. Da igual. El texto es tan bueno que no te cansas. Estoy pensando seriamente en la posibilidad de pedirle  a Alberto San Juan que nos contrate de relaciones públicas. Alberto San Juan sostiene  que el 23 f no fue un golpe de estado fallido, sino que triunfaron los principios fundamentales del régimen tal y como había querido Franco: la corona, las fuerzas armadas y cuerpos represivos del estado que continuaron siendo los mismos que durante el franquismo y las élites económicas financieras que habían apoyado el golpe del 18 de Julio y que son las que continúan engrosando sus bolsillos con sueldos astronómicos en la crisis actual. 

Al acabar la obra, me reuní con mis amigas y dejé que mis padres se alejaran preguntándose un poco taciturnos sobre el sentido de la obra, aunque iban a paso muy lento porque todavía escuché como mi padre le decía a mi madre:
- Qué guapas y listas que son todas- refiriéndose a mi y a mi grupo de amigas del instituto, a lo que mi madre contestó :
-Si, y qué frágiles...

A punto estuve de correr a decirle a mi madre que más claros habían sido sus tiempos de postfranquismo, que nuestros tiempos de rancia postmodernidad, una palabra que diga lo que siga mi ex directora de tesina, nadie ha sabido definir jamás. Pero me contuve. Durante la cena, Carla nos regaló su nuevo CD, que ha sido financiado mediante un sistema de mecenazgo online llamado crowfunding: Get on Board. Las Domisol Sisters cantan canciones en inglés de swing a lo Ella Fitzerald vestidas de pin ups de los años cincuenta. He leído que ahora el actual gobierno se propone también limitar el crowfunding, un sistema nacido de la creatividad de los artistas para financiar proyectos que de otro modo muy difícilmente podrían ver la luz; a través del crowfunding un artista consigue inversiones de todo tipo a cambio de contraprestaciones que regala a sus mecenas según el importe de la colaboración. Gracias a este sistema, mi amigo el fotógrafo German Caballero pudo editar un maravilloso libro que combina fotografía y entrevistas sobre el 15M, gracias a este sistema se han grabado discos, rodado cortometrajes, sacado adelante proyectos de diseño, se han dado a conocer cuenta-cuentos, grupos de teatro, poetas...


El sábado fui con mis amigas Marisa y Alba a ver Donde las papas queman, al Teatre del Carme, una producción de A tiro hecho dirigida por Carla Chillida que protagonizan Carla Chillida y Guille Zavala. La obra es un homenaje poético-musical a la vida de Victor Jara y Violeta Parra y a la historia política de Chile. Del mismo modo que mirar a la dictadura es mirar al presente, mirar el golpe de Chile es mirar al presente a través de un velo que haga esa mirada posible. Mis amigas comprendían muchas más expresiones y alusiones por conocerse América del Sur de arriba a abajo, me dí cuenta que Latinoamérica me reclama  ya desde todos sus contornos. Donde las papas queman no acaba de funcionar como obra de teatro, se notan las buenas intenciones, y los momentos de música y baile están bien pero no se entiende bien el contexto político ni los fragmentos en que los actores interpretan a Victor Jara y Violeta Parra o pretenden dramatizar momentos de la vida de los dos personajes. Tampoco se entiende muy bien que la obra termine en el golpe de Pinochet, y que no aborde la muerte del cantautor con todos los interrogantes que suscitó, precisamente porque no están claras las circunstancias, la obra no podía pasar de puntillas por ese momento. Sin embargo el momento en que después del golpe, la actriz canta a capela Maldigo del alto cielo tirando las patatas cultivadas en el suelo contra las paredes del escenario, con las fotos de los desaparecidos proyectadas detrás es realmente conmovedor.http://atirohecho.wordpress.com




El domingo por la mañana Javier Makhno me trae la nueva publicación de la revista Brotes Negros que la Biblioteca Ferrer i Guardia  autogestiona y publica gratuitamente cada tres meses en la que leo un texto suyo titulado: "Apuntes sobre el desastre generalizado"

"Lo que vemos en Grecia, Turquia, Ucrania, Alemania, o el Estado Español es básicamente, una especie de guerra civil global. (...) Entre el frente de batalla y la cómoda rutina a menudo sólo hay una calle de distancia. 

La ideología se diluye, la rabia aumenta y a mí me genera sentimientos encontrados. Crece el odio y el amor a partes iguales. La gente se encoleriza y cae en discursos vacíos. Pero al mismo tiempo, la gente se hermana y se juega la vida ayudando al vecino que, hasta ayer, sólo era un desconocido. Los gobiernos parecen vivir a años luz de los pueblos de los pueblos a los que gobiernan. (...) Asistimos al hundimiento de una manera de ver el mundo, a un colapso generalizado de todo cuanto existe. Las viejas banderas pierden fuelle, las nuevas a menudo asustan, y la gente ondea cualquiera que vaya en contra de su enemigo. Da igual si es la de la ideología soñada, la del mal menor o la de la provocación"



Somos esa generación que se pasó la adolescencia rindiendo tributos al No Future, hasta que el No Future se hizo presente. Desde entonces miramos hacia atrás con insistencia. Mejor que nadie lo sabe mi otro amigo JM, que ha ganado con su grupo Delaire el concurso de Sona la Dipu y desde entonces no paran. Un día me lo encontré en la cafetería de la facultad de historia, ese lugar al que acudes con la esperanza de encontrarte a alguien conocido que te aguante la depresión y te pague el café y me dijo : "yo no sé que podemos hacer para evitar lo que está pasando, pero siempre podemos sentarnos con la gente que nos importa y una cerveza a contemplar el Apocalipsis"

¿ Se trata de cambiar el curso de los acontecimientos? ¿Se trata de cambiarnos a nosotros mismos? ¿Se trata de seguir encontrándole un sentido a todo esto? Reinventaremos la resistencia, reinventaremos la poesía.
Si, cuando todo esto pase, cuando ya quede atrás, escribiremos los libros con las palabras adecuadas, reinventaremos las películas en blanco y negro con actrices de media cabeza rapada que se hagan las mismas preguntas que tú te haces hoy. Reinventaremos la reinvención.
Pero recuerda, lo cantan Delaire "Nada de esto puede ser el fin de nada, todo siempre ha sucedido alguna vez. Toda respuesta merece ser preguntada, todo siempre ha sucedido alguna vez ".

Dignidad: cualidad del digno, el que se respeta a sí mismo, el que merece respeto. 
















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